sábado, 13 de marzo de 2010

Panorama Político: Los "K" y la "Oposición" Trenzan a Espaldas del Pueblo para Frenar la Crisis

CAPEANDO EL TEMPORAL
Con condimentos de show electoral, pero reflejando que la crisis del régimen político y la economía están mucho peor, gobierno y “oposición” tensaron demasiado la cuerda. Desde Wall Street y el establishmen doméstico, llamaron a descomprimir y a buscar un acuerdo. Saben que se recalienta el conflicto social y con la gobernabilidad no se juega. Ambos bandos quieren que CFK termine su mandato, pagar la deuda y descargar la crisis hacia abajo. Sólo difieren en los ritmos y estilos para hacerlo. Muestran que no hay salida con ellos y que mientras apoyamos a los que luchan, hace falta construir algo nuevo desde la izquierda como proponemos desde el MST.

Escribe: Guillermo Pacagnini
La crisis política en las alturas desatada a principios del verano alrededor de la decisión presidencial de echar mano a las reservas para hacer caja y pagar la deuda, transita por un nuevo capitulo y se ha profundizado.
Cuando muchos creyeron que con la asunción de Marcó del Pont, que contaba con un guiño “opositor” se cerraba la opereta, las peleas entraron en una espiral que tensó demasiado la cuerda.
Primero el gobierno, pese a su debilidad y con la inestimable ayuda de Menem y su palo de golf, dejó en ridículo y sin quórum a radicales y pejotistas disidentes. Luego la oposición le devolvió la atención quedándose con la mayoría de las comisiones y los cargos legislativos, en un frente único que difícilmente pueda tener expresión electoral. Con el discurso presidencial de inauguración de sesiones parlamentarias y el anuncio del pago de la deuda con reservas y nuevos DNU, y la respuesta “opositora” preparándose para anular los nuevos decretazos y bajar de un hondazo a la presidenta del Central, la situación nacional se recalentó al extremo al punto que algunos nostálgicos de las épocas en que el régimen democrático burgués gozaba de buena salud hablaron de la peor crisis institucional desde 1983.

LA CRISIS EN LA RAÍZ DE LAS PELEAS
En primer lugar, el agravamiento de la crisis económica es el factor fundamental, estructural, de tamaño despelote en las alturas. La mayoría de los trabajadores, desocupados, amas de casa, ven estas peleas como ajenas a sus necesidades y eso alimenta su bronca contra toda la vieja política. Pero la relación existe. La crisis económica se ha agravado. Se reactivado la fuga de capitales, la recaudación no alcanza, la caja de la ANSES se vacía como antes lo hizo el superávit fiscal y los dividendos que entran por la balanza comercial apenas alcanzan para sostener el dólar con algunas maniobras desde el Central. Se necesita plata. En la corte de los Kirchner, que necesitan maquillar su imagen y todavía sueñan con recomponer un proyecto, alentados por algunos sectores que ven que la oposición todavía no muestra una dinámica creíble, se resisten a implementar un ajuste clásico que pueda hacerlos tambalear. Como antes echaron mano a la plata de los jubilados, ahora apuestan al impuesto inflacionario y a comerse las reservas, para hacer caja para comprar algunas voluntades y para pagar la deuda. Radicales, pejotistas disidentes y demás, son partidarios de un ajuste más tradicional, achicando “el gasto público” y pagando del presupuesto la deuda. Todos están por pagar la deuda y ajustar, sólo difieren los estilos. Ya sea por la vía de la inflación o por la rebaja directa, unos y otros están por pagar y ajustar.
También las peleas reflejan la crisis del régimen político. La debilidad atroz del gobierno, que viene en debacle creciente, es suplida por un acentuamiento de sus rasgos autoritarios. Saben que la oposición es un mamarracho. Y que desde los sectores más concentrados del establishment, los intentarán sostener si no surge otra variante de recambio y además porque todavía se benefician de su “capitalismo de amigos”. La “oposición” quiere volver a la normalidad de las instituciones, sobre todo ahora que controla al parlamento, sin embargo su fragmentación y ausencia de propuestas alternativas reales, la vuelven impotente a la hora de vertebrar una posibilidad de recabio efectivo. Por eso puede haber nuevos realineamientos en los intentos de rearmar un PJ anti"K", con o sin el macrismo: un radicalismo, con o sin Cobos, con o sin la C. Cívica o una tercera variante hacia la centroizquierda que pueda incluir a Juez, Binner, Stolbizer y Solanas. Se verá.

EL CONFLICTO SALARIAL PEGA DESDE ABAJO
La crisis está motorizando varios conflictos sobre todo en el sector docente y estatal y crece la presión por la apertura de paritarias en el sector privado en gremios importantes. Tienen como común denominador el agravamiento de la crisis económica. Lejos de las peleas allá arriba, se siente la carestía, el déficit salarial o de trabajo, los indicadores sociales se deterioran aceleradamente y ello incentiva el conflicto social. Las consecuencias se ven en la canasta familiar, con el febrero más caro de la década. Y el aumento exponencial de la brecha entre ricos y pobres.
El centro es la pelea salarial. Por abrir, reabrir o adelantar las paritarias, que se inician en los principales gremios. Los industriales pretenden enchalecar los aumentos en menos del 14%. El gobierno en menos del 19% y para ello convocó a Moyano y la CGT a cambio del plata de las obras sociales. Pero desde abajo hay presión y las brechas entre la propia burocracia hace que se reclame en varios gremios más del 30%, como en la Carne, e incluso que se reclamen cláusulas de indexación salarial trimestral. En el estado recrudecen los conflictos. El gobierno, con la ayuda de la burocracia de la CETRA, debió poner algo de plata y logró postergar por el momento la pelea en Buenos Aires y capital, en base a un aumento en dos partes. Pero son varias las provincias donde sigue la lucha, los estatales por el contrario tienden a profundizar los reclamos, y los municipales de Capital están en alerta y movilización.
Se impone un aumento general de salarios con reajuste automático y la reapertura de paritarias libres. El reclamo de no pagar la deuda, aparece como la medida que posibilita estas reivindicaciones.

CALMANDO LAS AGUAS
Sobre el cierre de esta edición, había febriles negociaciones en busca de un acuerdo. Los que quieren manotear las reservas para pagar la deuda (los K y aliados) o los que las quieren ponerlas como garantía y pagar con el presupuesto (oposición peronista y radical) coincidirían en una ley. ¿Habrá fumata? Es probable, porque hubo un febril llamado desde el empresariado de afuera y local a no poner en riesgo la gobernabilidad, ya que el gobierno está débil y no hay recambio “sustentable”. El propio Clarín, que se especializa en denigrar a los K, bajó los decibeles y llamó a la cordura: “Si se pretende disolver los modos brutales del kirchnerismo con otros métodos parecidos, se cambiará de collar pero el perro seguirá siendo el mismo. Sería un grave error que cometerían quienes aspiren a ser sucesores de este ciclo de poder que se va agotando. Tanto como, con el habitual afán fundacional argentino, derrumbar lo positivo, en lo económico y social, que deje tras su paso el kirchnerismo”. Los consultores del imperialismo hicieron lo suyo a través de informes reservados de Wall Street: el Barclays Bank y el Goldman Sachs elogiaron el compromiso de pago que confirma los nuevos decretos «legalmente más prolijos» pero alertaron que la crisis política agrava la tormenta económica, «el ruido político de esta movida podría generar una escalada y traería riesgos adicionales».
Seguramente podrán capear el temporal por un breve período, pero en la medida que no resuelvan la crisis del modelo y crezcan las peleas desde abajo, la gobernabilidad seguirá amenazada y el fantasma de un nuevo argentinazo va a sobrevolar de la mano de la movilización obrera y popular.

HAY OTRA SALIDA A LA CRISIS
Junto al apoyo a las luchas y la exigencia a la CGT y la CTA de un plan de lucha nacional por salarios y asistencia social, hay tres planteos políticos que hacemos desde el MST y queremos debatir con los luchadores, para responder a la crisis nacional.
El primero es la necesidad de dejar de pagar la deuda.

Como primer paso para que haya salario como reclaman trabajadores, para que no haya ajuste a las provincias, para que haya asistencia social y trabajo genuino como reclaman los desocupados. Y que sea la primera medida de un plan económico alternativo para que la crisis la paguen los de arriba y pelear por una segunda independencia nacional.
El segundo es la necesidad que el pueblo debata y decida colectivamenteun nuevo proyecto de país, que para nosotros debería ser una Argentina socialista.

Ni los enjuagues del oficialismo y la oposición en el parlamento, de espaldas al pueblo, ni las medidas autoritarias de los Kirchner. Se necesita una Asamblea Constituyente libre y soberana.
El tercero es la necesidad de cambiar y sumarse a trabajar con el MST para poner en pie una nueva alternativa de izquierda.

Porque esta crisis que nos quieren hacer pagar muestra que, tanto los K como las variantes de los Carrió, los radicales, los Duhalde, etc... no van más, que la centroizquierda tampoco es salida. Que hace falta poner en pie una nueva alternativa de izquierda amplia y unitaria, con propuestas anticapitalistas, para impulsar la pelea por dejar de pagar la deuda, por una Constituyente, por la Segunda Independencia Nacional en el camino de un nuevo proyecto de país, una Argentina Socialista. En función de ello te invitamos a sumarte al MST.

No hay comentarios:

Movimiento Socialista de los Trabajadores por una Nueva Izquierda